Los amantes de las autocaravanas estamos de enhorabuena. Un reciente informe de ASEICAR revela que el caravaning es la forma más sostenible de viajar 🌿. Ello es debido a que la huella de carbono generada por las autocaravanas es menor que la que deja tras de sí el turismo convencional.
Todos tenemos claro que viajar en autocaravana es sinónimo de libertad y de conocer nuevos lugares. A partir de ahora, gracias al informe elaborado por ASEICAR, también sabemos que, nos ayuda a cuidar del medio ambiente. Medios de la talla de Europa Press o la COPE ya se han hecho eco de esta noticia, así que nosotros no podíamos quedarnos atrás.
Por si aún no lo sabías, la huella de carbono sirve para medir el impacto total que los gases de efecto invernadero (GEI) tienen sobre el medio ambiente. Su emisión atrapa y absorbe el calor atmosférico, provocando el efecto invernadero. Esto, en principio, no es malo, porque ayuda a mantener la temperatura del planeta. Sin embargo, llevado al extremo, contribuye a acelerar el calentamiento global.
Hemos de entender la huella de carbono como una herramienta que nos ayuda a cuantificar el impacto medioambiental de nuestras acciones. La unidad que se utiliza para ello es la tonelada de dióxido de carbono equivalente (CO2-eq).
Óxido nitroso, metano, dióxido de carbono… todas las actividades individuales e industriales generan este tipo de gases, ya sea de forma directa o indirecta. Su potencial de impactar en el calentamiento global se mide en GWP (Global-Warming Potential), que toma como referencia el dióxido de carbono (cuyo valor estándar es igual a 1).
Es evidente que la industrialización ha recrudecido los efectos negativos que las emisiones GEI tienen sobre el medio ambiente. En este punto, no podemos ignorar que la industria del turismo es una de las más contaminantes, llegando a general el 5% de las mismas (OMT, 2007).
Lo cierto es que no podemos vivir sin turismo. Por un lado, su importancia económica es innegable; de hecho, si nos limitamos al caso de España, se trata del sector que más riqueza aporta a la economía nacional: nada menos que el 14,6% del PIB. Por otra parte, viajar nos proporciona una serie de beneficios psicológicos imprescindibles para llevar una vida sana y equilibrada (reduce el estrés, estimula la creatividad, ayuda a socializar, etc.).
Al igual que sucede con otros aspectos de nuestra vida, no nos queda otro remedio que aprender a armonizar nuestra necesidad de viajar con el respeto al medio ambiente. Es aquí donde entra en juego el ecoturismo… y ahora sabemos que las autocaravanas juegan un papel muy importante dentro de él.
ASEICAR (Asociación Española de la Industria y Comercio del Caravaning) es una institución creada en 1988 para representar a las empresas españolas del sector de las autocaravanas. A consecuencia de su actividad, esta organización suele presentar diversos documentos relacionados con el sector (guías, legislación, manuales y el informe del que hoy hablamos). El informe tiene por título Huella de carbono de producto de un modelo de autocaravana tipo y análisis comparativo respecto a otras formas de turismo. Se trata de un documento redactado en Valencia el pasado mes de septiembre de 2023 y presentado en Salón Caravaning de Barcelona que se celebró en octubre de 2023.
El objetivo de este informe es brindar un estudio comparativo de la huella de carbono generada por distintas modalidades turísticas que incluyen transporte y alojamiento. En él se presentan tres posibles escenarios vacacionales: fin de semana (600 km), una semana (2.500 km) y una quincena (5.000 km). El trabajo ha contado con el Dr. Javier Pérez Rodríguez (Profesor del ETSII de la UPM) como revisor externo, lo que garantiza su imparcialidad.
El informe concluye que las autocaravanas tipo producen una huella de carbono de 0,139 kg CO2-eq por cada kilómetro recorrido. Teniendo en cuenta que este tipo de vehículos pueden recorrer durante toda su vida útil alrededor de 300.000 km, su impacto medioambiental total sería de 41.400 kg CO2-eq.
Por supuesto, debemos contextualizar lo anterior en base al caso concreto. Después de todo, la autocaravana que cuenta con un buen mantenimiento contaminará menos que aquella que no se haya cuidado lo suficiente. Otro factor determinante será que en su fabricación se hayan utilizado materias primas locales y procesos productivos sostenibles.
En consecuencia, más allá de la huella de carbono producida por las autocaravanas tipo, el mayor o menor impacto medioambiental de una autocaravana es cosa de dos. Ciertamente, tanto quien la fabrica como quien la conduce juegan un papel decisivo a la hora de hacer que este tipo de vehículos resulten más o menos contaminantes.
El punto fuerte del informe viene cuando compara la huella de carbono producida por las autocaravanas con otras tipologías turísticas que combinan transporte y alojamiento. En casi todos los escenarios que se plantean, la autocaravana se revela como la opción de menor impacto medioambiental.
Tipología turística | Fin de semana | 7 días | 15 días |
Coche + bungalow | 112,81 kg CO2eq | 458,00 kg CO2eq | — |
Coche + hotel | 116,49 kg CO2eq | 469,06 kg CO2eq | 952,12 kg CO2eq |
Tren + hotel | — | 53,15 kg CO2eq | — |
Avión + hotel | — | — | 1063,45 kg CO2eq |
Autocaravana | 88,96 kg CO2eq | 364,24 kg CO2eq | 734,23 kg CO2eq |
En el estudio comparativo solo hay una opción más sostenible que el caravaning: la opción que combina tren y hotel. La electrificación de las vías y el hecho de que sea un transporte público (la contaminación se prorratea entre todos los pasajeros) están detrás de ello. Por contra, la alternativa que aúna avión y hotel es, de lejos, la más contaminante.
A la vista del informe, queda claro que las emisiones GEI de las autocaravanas son menores que las generadas al combinar coche o avión con alojamiento. Esto se debe a que aquellas equilibran las emisiones del transporte (mayores) con las de las pernoctas (menores). El impacto medioambiental será aún más reducido en el caso de viajes largos (más pernoctaciones) o distancias cortas.
Concretamente, el ahorro en kilos de CO2 que traen consigo las autocaravanas oscila entre el 22% (7 días) y el 30% (15 días).
Al margen de las evidencias cuantitativas, salta a la vista que viajar en autocaravana propicia una forma de viajar cualitativamente ecológica. El informe llega a esta conclusión al hacerse eco de que esta modalidad turística intensifica el contacto con la naturaleza.
Quienes viajan en una autocaravana conocen muy bien el precio y el esfuerzo que implica transportar recursos como el agua y la electricidad. En consecuencia, su consumo se vuelve más racional y, por ende, más sostenible.
Verdaderamente, el informe de ASEICAR supone una muy buena noticia para todos los entusiastas de las autocaravanas. Este riguroso documento nos confirma que viajar en ellas significa apostar por el turismo que menos huella de carbono genera. ¿Acaso se te ocurre una forma más placentera de cuidar del planeta?